Nuestras intenciones educativas…
• Insertar la acción educativa dentro del contexto socio-cultural del alumno e incorporar en las programaciones didácticas contenidos relacionados con su entorno.
• Desarrollar una metodología activa, abierta y flexible que en cada momento se adapte a las necesidades de los alumnos y que incorpore las innovaciones didácticas y las nuevas metodologías para mejorar la calidad educativa y despertar el interés del alumnado.
• Fomentar el uso de lenguajes diversos, de nuevos desarrollos tecnológicos, de estrategias de aprendizaje variadas para conseguir responder a las características de cada alumno y responder al desarrollo humano y social.
• Buscar el desarrollo personal y social de nuestros alumnos a través de los valores y acciones propias actividad física y el deporte.
• Fomentar la responsabilidad personal y grupal de los alumnos de manera que conozcan y asuman sus derechos y obligaciones.
• Procurar que cada alumno desarrolle al máximo todas sus capacidades e insistir de forma especial en el trabajo bien hecho, el sentido práctico y la constancia.
• Ofrecer un modelo de persona con los valores humanos y cristianos de manera que cada alumno pueda crecer en las cuatro dimensiones que trabajamos: su relación consigo mismo para que sea crítico, su relación con los demás para que sea fraterno, su relación con el mundo para que sea solidario y comprometido y su relación con Dios para que viva la libertad de hijo de Dios.
• Educar en la solidaridad sobre todo acogiendo a jóvenes de diferentes contextos sociales y religiosos y promover el diálogo y la tolerancia para vivir de manera positiva la diversidad. Estimular el sentido crítico y la presencia renovadora en la sociedad para que sea más humana y justa.
• Cultivar en nuestros alumnos la curiosidad, la capacidad de asombro, el silencio, la reflexión… como elementos que desarrollan su interioridad, así como su competencia emocional y espiritual.
• Ofrecer un modelo de educador que se compromete con el alumno, que lo acoge incondicionalmente con sus características personales, al estilo de S. Marcelino Champagnat, para quien "para educar es preciso amar".
• Atender preferentemente a los alumnos que tienen mayor dificultad para que crezcan desarrollando todas sus capacidades.
Crear un clima adecuado de convivencia y respeto en el que se pueda desarrollar con normalidad la acción educativa, educando en la resolución de conflictos, la mediación como solución y el manejo de habilidades